La importancia de ser puntual

Ser puntual o impuntual es una de las características que nos define, sobre todo en lo que respecta al entorno profesional. Además, la puntualidad es uno de los hábitos de las personas exitosas. Habla del compromiso y el valor que le damos a nuestro tiempo y al tiempo del otro, además de ser uno de los factores más observados por los reclutadores.

La puntualidad nos vuelve disciplinados

Cuando tomamos una responsabilidad debemos estar dispuestos a cumplir con nuestras obligaciones. La puntualidad es uno de los actos de disciplina que tendremos que adquirir, ya que de lo contrario estaremos comunicando que no nos sentimos preparados para asumir responsabilidades; ya sea que hayamos quedado en llegar a una entrevista de trabajo a determinada hora o que se trate de un encuentro con nuestro mejor amigo.

La puntualidad nos aporta orden

No estar nunca a tiempo es una de las formas de fracasar en la consecución de nuestras tareas y de demostrar desorden en nuestra rutina. Sin embargo una persona puntual es capaz de organizar su tiempo y poder cumplir con todo, de mejor forma y más eficaz que quien siempre está contrarreloj.

Ser puntuales es respetar el tiempo del otro

Al ser personas puntuales estamos respetando a los demás y asumiendo que su tiempo cuenta tanto como el nuestro. Hacer que todos tengan que estar siempre esperando por ti porque eres impuntual es demostrar nulo interés, respeto y consideración con el resto.

La puntualidad es una de las formas de generar confianza

Suponte que tienes un jefe que tiene que estar todo el tiempo controlando la hora que llegas a la oficina porque nunca lo haces a tiempo; ser puntual te librará de esto ya que hará que el resto tenga confianza en ti porque habrás demostrado que eres digno de merecerla.

Piensa por qué eres impuntual, y corrígelo

Descubrir que te lleva a ser impuntual es fundamental para poder cambiar esa actitud. Por ejemplo, si se trata de que procastinas demasiado en la mañana antes de salir, prueba dejar todo preparado el día anterior.  Analiza cada situación para descubrir cuáles son las causas de tu demora y poder corregirlas.

Planifica tu tiempo

Una correcta planificación te ayudará a no olvidar nada y poder cumplir con todas tus tareas pendientes. La planificación es una de las formas más efectivas de tener éxito en todo lo que emprendas. Aunque te parezca tedioso, prueba organizar tu semana en una agenda: todo lo que debes hacer de acuerdo al tiempo con el que cuentas. Verás que la organización de tus días te ayudará a cumplir con todo y además, es probable que hasta te termine sobrando tiempo.

Reorganiza tu horario

La última es una de las técnicas más utilizadas por los impuntuales para poder llegar a tiempo. Consiste en cambiar la hora a todos los relojes: adelántala unos 15 o 20 minutos y rígete por ese horario de ahora en más (nada de estar pensando en que en realidad cuentas con ese tiempo extra). Adecúate a la hora de tus relojes como si fuera el horario del resto del mundo. Este método te ayudará a convertirte una persona puntual.

Fuente: Universia.edu.ve