Cómo un negocio se ve afectado si no utiliza las redes sociales

 
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La interacción es la principal herramienta en el mundo digital actual. Muchas marcas y negocios no entienden esta acción obviando el uso de redes sociales o simplemente abandonando sus cuentas.

Prácticamente todos los negocios medianos y grandes han creado sus perfiles en Facebook, Twitter y otras redes en las que el objetivo principal debería ser interactuar con su público. Es preciso comprender cómo afecta a la imagen del negocio o marca la poca importancia que se le entrega a las cuentas Social Media.

En algo que podemos converger es en el hecho de que nuestros negocios necesitan clientes. La forma en que los conseguimos y mantenemos es lo que diferencia a un negocio de otro. Muchas marcas piensan que las redes sociales no son capaces de generar nuevos clientes y que frecuentemente dan más de un dolor de cabeza en ausencia de beneficios concretos para los objetivos del negocio.

Lo anterior se ve reflejado en la poca importancia que se asigna a las cuentas creadas principalmente en Facebook y Twitter, en las que se muestra una serie de ofertas y beneficios, pero no se conversa con los usuarios. A esta conversación se le denomina en Social Media “Engagement”, que representa la interacción entre la marca y los usuarios. Existen numerosas empresas que han conseguido crear una imagen poderosa gracias a sus acciones en las plataformas sociales. Un hecho significativo es que las que no trabajan en ese sentido piensan que “no pasa nada” en caso de no trabajar adecuadamente con estas redes. Si bien es cierto el hecho de que se actualice permanentemente con mensajes acerca del negocio por lo menos entrega la sensación de que sí hay alguien tras la cuenta, la falta de interacción provoca en los usuarios la sensación de que la marca no quiere ni pretende conversar con ellos, ni menos entonces atender a sus necesidades, problemas y consultas. Y la mayoría de las veces así es. Entonces, se muestra como una marca soberbia, con todos los inconvenientes que ello acarrea en términos de imagen y percepción negativa en el target al que se quiere apuntar.

Por otro lado están las marcas que abren una cuenta y luego la dejan completamente abandonada, actualizando una o dos veces al mes su estado. Estas son las que más daño reciben en su imagen, pues la percepción de los usuarios es que la cuenta está abandonada. Y de acuerdo a la mecánica de la mente humana, se asume que no es solamente la cuenta en Facebook la que se encuentra sin acción, sino también la marca que no responde consultas y parece trabajar para otro mercado.

Efectivamente lo que piensan los usuarios al seguir una de estas cuentas y no encontrar respuesta es que o el negocio ya no funciona, o simplemente no tienen interés en que nosotros –los usuarios de redes sociales- seamos sus clientes.

No tener cuenta en las redes sociales no es la solución, ya que las personas hoy buscan información por ese medio. Si no la encuentran, muchas veces se elige a la competencia. Y en caso de encontrar una cuenta de la marca y esta no refleja interacción con otros usuarios, probablemente también se elegirá a otra marca que sí actúe de acuerdo a los tiempos.

Fuente: Guioteca.com