Cómo innovar en el mundo empresarial actual
Desde cajas de pizza redondas hasta sandías cuadradas, pasando por una invasión de bebidas light, sin azúcar, con azúcar de cáñamo o azúcar del mismísimo infierno. Lo cierto es que las empresas han salido a buscar cambios para que sus productos se adapten a este nuevo mundo, en el que hoy la kétchup viene en sachet y mañana en un envase con la tapa de cabeza.
El que se estanca con una idea no avanza, y atorarse con los modelos clásicos es el principal factor por el que las empresas desaparecen. Claro, es mucho más sencillo hacer el mismo producto que se fabrica hace años, con el mismo envoltorio y los mismos ingredientes; pero lo cierto es que el mundo empresarial no es sencillo. Para avanzar hay que cambiar, para permanecer en la mente del cliente hay que cambiar. Ninguna empresa quiere que su producto se vea como algo obsoleto, por esto, las que realmente desean avanzar se lanzan de lleno al desafío de innovar.
Los distintos mercados se vuelven cada día más competitivos, y con ello, el cliente necesita sentirse a gusto con lo que consume. Hoy en día, prácticamente todo es personalizable, o adaptable a las preferencias de usuarios completamente distintos, y en este mundo de competencia y velocidades extremas, dar valor a lo que el cliente desea obtener de una marca se vuelve fundamental.
En resumen, si el cliente piensa que el envoltorio de tus pizzas arruina su comida o resultan inadecuadas, te verás obligado a abandonar tus tradicionales cajas cuadradas para comenzar a elaborar cajas redondas. No es una cuestión de opción, si tu no cambias el cliente pasará de ti y buscará lo que desea en otro lugar. Lo mismo ocurre con los servicios.
Entonces, si es tan importante… ¿Por qué las empresas no innovan? De acuerdo a la Harvard Business Review, el problema está en los empleados, que no tienen la motivación suficiente como para buscar estos objetivos. Luego de encuestar a 3.500 personas de Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Alemania y la India, se determinó que si bien los empleados consideran a la innovación como una responsabilidad colectiva, no todos poseen los recursos económicos o de personal necesarios para cumplir con estos planes. Además, tampoco tienen la motivación necesaria para enfrentar las constantes negativas de sus jefes ante cada propuesta que presentan, por eso deciden descartarlas y asumir que el cambio no llegará desde su sector.
La colaboración entre los directivos, con los mandos medios y el resto de los integrantes de la plantilla se vuelve fundamental en estos casos. Para atraer al cliente primero hay que atraer al empleado, brindarle las oportunidades y medios necesarios para que desarrolle sus ideas y las lleve a cabo, generando así un beneficio para la empresa. Ante este panorama, el trabajo en equipo y las compensaciones por productividad se presentan como el mejor remedio para hacer a un lado a los dinosaurios del mercado y lanzarse de lleno hacia un terreno mucho más fértil y próspero.
Fuente: Universia.es