Cómo Vencer la Ansiedad de los Exámenes

 
  Compartir este Artículo.

Respira hondo. Todo irá bien.

Sumergidos de lleno en plena época de exámenes, y con el fin de curso ya muy cerca, nuestro cuerpo y nuestra mente nos pueden jugar una mala pasada. Vencer la ansiedad de los exámenes es posible; se trata de evitar llegar hasta situaciones extremas provocadas por el miedo, la frustración o el estrés propio de las fechas. Te dejamos con algunos consejos que te ayudarán a combatirla o a evitar incluso que llegue a aparecer.

La planificación es esencial para esquivar los agobios. Pregunta todas las dudas que tengas antes de que llegue el examen y asegúrate de que tienes todo el material a punto para ello. Haz un calendario de estudio con las horas que dedicarás cada día a cada materia y verás cómo sientes que tienes todo mucho más controlado.


Cuida tu salud física. Esto debes hacerlo durante todo el curso, así conseguirás llegar a estas fechas con mayores garantías de energía. Y, durante esta época, también debes hacerlo, llevando una dieta equilibrada y saludable que incluya pocos azúcares y mucha fruta y verdura. Practica algo de ejercicio físico, aunque solo salgas a andar un rato cada día… Pero introduce tiempo para ello en tu planificación. Y, sobre todo, concede al descanso toda la importancia que tiene y desconecta en los momentos que toque hacerlo. Al final, todo suma.


Relativiza. Sé que es complicado hacerlo cuando estás en plena época de exámenes y te estás jugando el curso o entrar en la universidad en la que quieres hacer la carrera con la que siempre has soñado. Es cierto que esto es muy importante, pero si añades un extra de presión mental en forma de miedo será muy complicado que controles la ansiedad. Es normal que te sientas nervioso y es una forma de defensa frente a lo que viene, pero no lleves este tema a una dimensión extrema, pues solo conseguirás estar aún más estresado.


Ten pensamientos positivos. Está comprobado que lo positivo atrae a lo positivo y lo negativo, a lo negativo. Entonces ¡hay que pensar en positivo! La actitud frente a las cosas que te suceden es lo que va a marcar cómo se resuelvan al final, así que piensa que todo irá bien. No es cuestión de autoengañarse, sino de evitar frases derrotistas y pensamientos del tipo “seguro que suspendo”, “lo voy a hacer fatal”… eso fuera de la mente, desde ya.

Fuente: Becasestudio.net