¿Estás listo para ser tu propio jefe?

Ser tu propio jefe tiene muchos beneficios, pero también implica responsabilidades. ¿Estás listo para enfrentar este desafío?

Ser dueño de tus horarios, elegir a tu antojo los días de vacaciones, no sufrir la presión de las fechas de entrega...Las potenciales "ventajas" de ser un jefe propio parecen demasiado buenas como para dejarlas ir. Sin embargo, tomar este camino implica muchas más responsabilidades que beneficios.

Antes de tomar esta importante decisión, es importante que te hagas algunas preguntas como las que te presentamos a continuación: 

¿Tengo disciplina de trabajo?

Primero y principal, debes poder determinar si tienes la suficiente disciplina como para afrontar este desafío. Es importante que sepas que las responsabilidades excederán ampliamente a los beneficios: igual deberás entregar los trabajos en fecha, serás tú quien dé la cara ante los clientes, tienes que lograr ser productivo aún sin tener que cumplir un horario, etc. 

¿Estoy dispuesto a aprender de todo?

Los emprendedores que logran sacar sus proyectos adelante saben de finanzas, contabilidad, creatividad, marketing, administración, informática, etc. ¿Estás dispuesto a tomarte el tiempo de formarte en todas estas áreas?

¿Soy capaz de delegar tareas?

Habrá momentos en los que la pasión y la responsabilidad te llevarán a querer abarcarlo todo. Esto no sólo es imposible, si no que te conllevará muchísimo estrés. Para tener un negocio, hay que saber delegar y confiar en el equipo que te rodea. 

¿Tengo resistencia al fracaso?

En tu camino al éxito tendrás miles de fracasos que superar. ¿Tienes la resistencia emocional y mental para lograrlo? Nunca olvides que detrás de cada error que cometas existe una lección que aprender, por lo que atravesar esta frustración no será en vano.

Fuente: Universia.cl